El segundo perfume analizado es
Pheromone for him de
Aloes of Ish.
Ish es un perfumista amateur norteamericano que elabora sus propios perfumes, todos aceites, al estilo oriental. Ish asegura que salvo los perfumes que cuentan con rosa todos los aceites utilizados son naturales, no sintéticos, y no usa ningún tipo de aceite para diluir. Supe de sus perfumes a través de Basenotes y me llamo la atención, así que me decidí a probar. Los precios son razonables, entre 15-25€ los mukhallats (mezclas de aceites), y regala por cada 3 ml comprados otros 3 ml de su "marca blanca", que en uno de los 3 recibidos me pareció superior al aceite comprado, ¿qué más se puede pedir? ¿qué incluye muestras? pues si se lo pides lo hace.
Dentro de su oferta me llamo la atención el uso de ingredientes/tinturas animales que son imposibles de encontrar a día de hoy en la perfumería "comercial" y muy difíciles de encontrar fuera de oriente próximo. Así que me decidí a pedir dos de sus "blockbusters" con estas notas,
Ruthvah y
Pheromone for him. Hoy revisaré mi favorito,
Pheromone for him.
Como no tengo ni pajolera idea de por donde empezar, es la primera vez que me he visto expuesto a estas materias primas/olores, empezaré por los ingredientes. Según Ish la fórmula cuenta, entre otras cosas, con:
almizcle del padre de Bambi,
ambergris,
civeta,
castoreum y oud. Según Ish todos los ingredientes animales proceden de granjas, por lo que consideraciones éticas aparte, "parece" que no incurre/incurrimos en ningún delito. A priori el único olor que soy capaz de identificar es el oud que está bajo el resto de olores que lo tapan. Y con tanto bicho por medio, ¿a qué debe oler? Fácil, huele a animal! Y cuando digo animal no me refiero a sobaco de camello, me refiero a algo similar a lo que pasa con el olor del cuero. Es agradable, o mejor dicho puede llegar a ser agradable, y reconoces perfectamente que es un olor de origen animal.
Con un poco de ayuda pofesioná he sido capaz de identificar la civeta, el almizcle y el ambergris. Y he podido comparar con sus homólogos sintéticos. Me ha llamado la atención lo "chillona" que es la civeta y el gran poder de fijación que tiene el conjunto, y se entiende perfectamente porque se usaban en perfumería en el pasado.
Tanto la proyección como la duración son eternas. He probado a usar una cantidad mínima, menos de una gota, junto con otros aceites para ver como se compenetra con otros aceites y la civeta acaba sobresaliendo por encima del conjunto. Lo que a priori limita la versatilidad del aceite y reduce su "usabilidad", no es un perfume para diario.
Fragrancia-8/10, todo un descubrimiento, pero no es para todo el mundo
Longevidad-9/10, nuclear
Proyección-9/10, nuclear
En resumidas cuentas, un olor diferente y muy especial que me acompañará una buena temporada.
Efectos del perfume sobre las féminas no descrito.