Aquí estoy en parte de acuerdo contigo, pero en otra no...
Está claro lo que a nosotros nos gusta y como vemos la vida, siendo el estilo de vestir una parte más de un modo de ver las cosas y conducirnos en general.
Pero hay que tener en cuenta que tenemos amistades, conocidos, compromisos, etc, que o bien las vida les ha llevado por otros caminos y no ven las cosas igual, o bien nunca las han visto así, y que tienen a bien invitarnos a este tipo de eventos. Incluso a veces son compromisos, pero a los que nos toca ir...Pues creo que nosotros precisamente debemos tener la capacidad (además nuestro armario nos lo permite) de amoldarnos a lo que se nos pide, creo es lo mínimo en muestra de agradecimiento hacia aquellos que han decidido compartir un momento así con nosotros.
Es obvio lo que a mi me gusta, y que tipo de bodas prefiero, pero para mi lo importante de verdad es ver a personas que en muchas ocasiones cuesta juntar, reencontrarme con viejos amigos, y sobre todo tener la suerte (y el privilegio) de haber sido invitado para un momento así. No cuesta nada (repito, menos a nosotros), el mantenernos elegantes relajando el tono si así lo pide quien te invita...
Saludos caballeros.