Lo interesante en mi opinión, es que utilizan la supuesta defensa de los derechos de los trabajadores para defender un mercado regulado, que para mi no tiene ningún sentido.

El sector debería ser transformado, regulando requisitos de las empresas y los equipos y estableciendo las condiciones mínimas de los trabajadores, a partir de ahí, competencia y mercado. Igual que pasa con la mayoría de actividades productivas del pais.

Por cierto Von Erlach, muy de acuerdo con lo del carbón. No tiene sentido mantener una tecnología zombi, a base de subvenciones. La Unión Europea ya esta detras del tema, y creo que un cambio impuesto esta al caer.