Últimamente me está dando la sensación en que se le da demasiada importancia al contraste en los looks. Como si fuera un valor añadido en sí mismo o incluso un requisito.
Yo pienso que es interesante jugar con ello a veces, combinando tonos y colores distintos para conseguir un mayor impacto visual tratando de preservar el equilibrio, pero no lo considero un ingrediente fundamental a la hora de escoger la combinación a encajar. Más bien al contrario, tiendo en general a usar soluciones monocromáticas dado que la naturaleza de alguna de mis prendas favoritas así me lo pide.
¿Cómo lo veis vosotros? Creo la encuesta en modo votación anónima porque soy consciente de que es un tema delicado y nadie quiere sufrir represalias por parte de los contrastistas del foro.