A ver, mi trabajo me gusta pero no es lo mismo. Aunque me guste, sin mi trabajo no podría vivir porque es una necesidad (para pagar facturas y zapatos todos los meses), aunque además tenga el privilegio de que me guste.
En cualquier caso, ayudar a otros a realizar sus sueños financiando sus proyectos empresariales y participando luego en sus consejos de administración es un trabajo como otro cualquiera, pero financieramente más desahogado.
Saludos.
Pedro