Uno de los cambios de opinión más radicales que he tenido en los últimos años ha sido sobre las camisas hawaianas. Antes las odiaba, ahora me encantan.
Y Hollywood ha tenido la culpa:
La verdad es que el bombardeo de esta prenda en el cine es constante y hay cientos de ejemplos más, pero para que os sangren un poco los ojos es suficiente.
En mi opinión, cuanto más hortera y llamativa, mejor.
Saludos.