Cita Iniciado por Kurtz Ver mensaje
Interesante trabajo. Supongo que lo que voy a decir no es políticamente correcto, pero espero que tampoco suene a simple desahogo machista.

El caso es que me parece que las mujeres (en general) no alcanzan a contemplar con lucidez la panorámica global del nuevo equilibrio de fuerzas. En parte porque se les ha vendido por parte de las impulsoras de los movimientos feministas con el mismo paternalismo (si no más) que el que se denunciaba como parte del problema original. Se podría decir que han pasado del paternalismo al maternalismo. Y es que se ha dado a entender que el rol tradicional del hombre en una sociedad machista (imperante hasta hace bien poco, las cosas como son) se limitaba poco menos que a disfrutar de sus privilegios como género dominante. Como si el dominio, la iniciativa, fuera algo cómodo. Como si el hecho de ser quien toma las decisiones, al margen de ser una ventaja (que lo es), fuera algo fácil de sobrellevar. Como si el hombre, tradicionalmente, además de ser quien hacía y deshacía, lo llevara a cabo de manera irresponsable, desentendiéndose de las consecuencias de sus actos. Por eso creo que el hombre (ahí ha dado el compañero en el clavo, en su vídeo) está acostumbrado a buscar, con mayor o menor éxito, en lugares que puedan aportar soluciones prácticas a sus problemas, tanto cotidianos como existenciales. Mientras, muchas mujeres siguen ancladas en la pasividad de quien espera que le digan que todo va a salir bien (y como que no).

Alguien debería haberles advertido de que llevar las riendas de tu vida, y las de las personas que dependen de ti, supone un esfuerzo considerable. Una tarea que hay que encarar de manera, ante todo, eficaz. El peso de la responsabilidad no es una cosa que haya que soportar sin más, ni mucho menos una excusa para justificar nuestros fracasos. Es algo que hay que mover con solvencia en la dirección correcta.
De acuerdo con todo. A modo de curiosidad recordaré que en el pasado al estar las mujeres tuteladas por los hombres, si tu esposa era acusada de algún crimen, tú como marido ibas al banquillo del acusado por cómplice, porque era tu responsabilidad. Tomar decisiones importantes supone asumir responsabilidades y riesgos. Y probablemente cueste algo más que las mujeres asuman esto último.