Este pasado fin de semana tuve el privilegio de asistir al Salón Internacional de alta relojería (SIAR2015) que se celebraba en Madrid, invitado por la joyería Tarin (Zaragoza) a la que desde aqui doy las gracias.
Os dejo una minicrónica con fotos. No esperéis grandes fotos: están hechas con el móvil... y un gintonic en la otra mano.
Se celebraba en un entorno privilegiado, el Palacio Miguel Ángel 27 de Madrid.
Nada más llegar, nos recibían algunas maravillas de Porsche (sponsor del evento):
Stand Jaeger Le Coultre: en la sala de la biblioteca, el stand más impresionante. Los chicos de JLC se lo montaron muy bien. Pudimos ver y tocar piezas muy especiales. En la parte de arriba, algunos expositores más y un grupo de relojeros de la marca, desmontando calibres para el deleite del personal.
Si ya antes de esto me gustaba la marca, de allí salí enamorado...
Stand Vacheron Constantin: otro de los stands que más me gustó. Sus piezas, tanto deportivas como de vestir, cautivan al tenerlas en la mano.
Stand Montblanc: contaba con un personal muy amable. Nos explicaron muchos detalles de sus modelos que un servidor desconocía. Además, sorteaban un reloj. Lástima que no tocase :-(
Stand Panerai: sin ser un entusiasta de la marca, disfruté de las explicaciones que nos dieron sobre algunos de sus modelos y la historia de la marca.
Stand IWC: pude probar algunos modelos pilot que me siempre me han gustado. Y constaté que definitivamente, los relojes grandes no son para mi.
Stand Cartier: Muy lujoso y decorado de forma exquisita. Este stand lo disfrutó más mi costilla que yo...
Stand Audemars Piguet: se deshiceron en atenciones. Nos dieron un tentempié, una copa de champagne y el relojero de la marca nos explicó montones de detalles sobre sus calibres.
Una maravilla poder ver la colección de modelos históricos que tenían expuestos.
Stand FP Journe. Reconozco que en foto no eran unos relojes que me llamasen demasiado la atención. Ahora bien, en vivo la cosa es distinta. El representante de la marca -que llevaba un FPJourne en cada muñeca- no hablabla español (punto negativo para la marca), pero nos atendió de forma exquisita en un excelente inglés y nos contó todos los detalles que quisimos sobre la marca.
Una vez visitados los stands, empezó una pequeña fiesta en el jardin del Palacio.
Lo cierto es que fue una velada estupenda, que se alargó mucho más de lo previsto con una cena en un restaurante de los alrededores. Vuelvo a agradecer a la joyería Tarin la invitación, las atenciones y el estupendo trato dispensado.
Ya subiré alguna foto más cuando tenga un rato.