Pero es que son todos iguales!!. No se salva uno de todos estos nacionalistas y separatistas catalanes. Viven de la patraña, el engaño, la impostura, el odio y claro, de su sentimiento obsceno.
Sin pela que repartir, la realidad aflora. Lo malo para Cataluña es que la fuga de empresas ya no va a tener freno, a pesar del Gran Mochilo Oriol.