Su nueva estrategia es hacerse la víctima en público para que no se hable de su mujer corrupta sino de lo malos que son los que le critican.
Por supuesto por detrás esta manejando los hilos para censurar y controlar el poder judicial.
Lobo con piel de cordero. De primero de bolivariano.
Además es patético, pero claro, sabe que entre charos y cabezas huecas pues tiene un nicho de millones de votos.