Como lo he comentado repetidamente, hay que ser paciente y estar atento a las verdaderas oportunidades: por mis Chelsea de Cheaney, construcción Veldtschoen y una piel excelente pagué menos de $200 dólares que son mi umbral para evitar IVA y aranceles. Hace poco perdí la oportunidad de una RM Williams en ante chocolate, que son de las mejores Chelsea del mercado, por no estar seguro de mi talla: cuando la confirmé, ya habían volado, costaban $199 dólares y me he lamentado mucho.
Las Segarra, no solamente presentan una piel dudosa, su diseño tampoco es afortunado: las boca de entrada a este tipo de bota tiene que ser relativamente angosta para que se ajuste al tobillo. Aunque puede ser por la foto, me parecieron anchas y sin buen ajuste, aún sin probarlas.