Creo que a los costes a los que se refiere son a los del stock de productos. Pese a que los márgenes posiblemente sean buenos, hay que defenderlos bien y para ello tienes que tener un producto que te diferencie (y si no es únicamente a nivel local si no por la red mejor) y buenos clientes/parroquianos. Pero lleva tiempo (años) y si va a ser tu única fuente de ingresos lo pasarás mal.
Nadie dijo que no se puedan abrir tiendas. Para abrir una tienda solo necesitas dinero y ganas. Otra cosa es que la conviertas en un negocio, que para eso lo ideal sería haber estudiado el mercado y calculado viabilidad, que a mucha gente se le olvida.
Si estamos hablando de una tienda de nicho - hablábamos de especializada en WW - el mercado potencial es muy reducido y posiblemente no llegues al umbral de rentabilidad nunca, por lo que tendrás que complementar tu cartera de productos con algo más mainstream, por lo tanto diluirás la autenticidad y serás otra tienda más, a competir con el resto de las habidas y por haber, y como bien se ha apuntado, el retail cada vez más es un mero probador para el online.
El rumbo del multimarca es hacia la reinvención trabajando en redes colaborativas o hacia la muerte y los locales comerciales los ocuparán tiendas monomarca a modo de experiencias de marca. Y eso no lo digo yo, son las predicciones de las escuelas de negocios, que no son ni más ni menos certeras que otras, pero son las que yo tengo de referencia.
Know who you are and dress accordingly.
Una tienda brick and mortar de ropa sería lo último que haría con mi dinero si de emprender se trata hoy por hoy. Es un modelo de negocio en vías de extinción.
aunque se vista de seda la mona, mona se queda.
Sí. Yo tampoco me tiraría a la piscina con eso.
Otra cosa sería reorientar una tienda pre-existente hacia ese estilo. Eso sí lo veo más factible. Combinado además con la venta (y presencia) on-line.
Los necios siguen la moda. Los pretenciosos la exageran. Quienes tienen buen gusto pactan con ella.
Lo veo complicado. Tiendo a pensar que el workwear tiene más salida en Barcelona que en Madrid (ojo, es sólo una percepción en base a lo que veo por la calle) y, pese a ello, las dos tiendas más o menos interesantes que había en Barna cerraron. Una era Duke, especializada en demin, y otra uno cuyo nombre no recuerdo, también en la calle Duc, que traía cosas que harían las delicias de Masca. Vendía entre poco y nada pese a su ubicación. Son pocos los que están dispuestos a dejarse cuatrocientos euros en unas botas u ochocientos en una cazadora, por muy Mackintosh for Japan que sea... Yo era uno de los pocos clientes fieles que tenían. Y Sergi Arola, con el que coincidí en la tienda alguna vez.