La llamada "violencia de género" es un constructo ideológico sobre lo que toda la vida ha sido y aún es en la mayor parte del mundo "violencia doméstica". La diferencia es obvia, aquella cuenta solo las mujeres víctimas de hombres, la otra cuenta todas las víctimas (H de M, H de H, M de M). Manos a la cabeza y escándalo "pero es que son muchas más las víctimas femeninas que masculinas!" Vale, y son muchas más las víctimas de accidentes laborales hombres y no solo por eso les hacen leyes a la medida de sus genitales.
España tiene una de las tasas de muertes por la llamada "violencia de género" más bajas del mundo. Por debajo, bastante, de la media europea y la mitad de las nórdicas.
Ni que decir tengo que el número de hombres víctimas de asesinatos de toda índole supera en varios órdenes las mujeres muertas por sus parejas, y de ellos no se habla. Específicamente, en
España 48 mujeres fueron asesinadas por sus parejas en 2017,
484 personas murieron por accidente laboral (a falta de datos ahora, dividamos a la mitad de hombres y mujeres, que no es así, mueren muchos más hombres) Qué problema es más grave? Por qué uno tiene una legislación ad-hoc e incomparablemente más atención mediática y, ojo, política que el otro?
En resumen, es una lacra sí, como lo es cualquier asesinato o crimen, pero en absoluto es un problema abrumador como se quiere hacer ver. Pero claro, la histeria de género es muy conveniente para ocultar esos otros problemas que sí amenazan nuestra sociedad como la conocemos: la corrupción política galopante, la existencia de una casta política parásita monstruosa, el doble que la alemana para la mitad de la población, una organización del Estado que es una ruina insostenible, el paro que es el mayor de Europa, y suma y sigue.